Mostrando entradas con la etiqueta sin lactosa. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta sin lactosa. Mostrar todas las entradas

martes, 11 de julio de 2017

NUGGETS DE POLLO CASEROS (sin gluten y sin lactosa)

¡Hola de nuevo familia! Ha pasado demasiado tiempo desde la última publicación en el blog aunque a través de la página de Facebook hemos seguido en contacto. 

Aunque tengo varias entradas pendientes hoy vuelvo con una receta muy fácil y que nos puede solucionar más de una comida o cena, especialmente si tenemos peques por casa. 
No sé si alguna vez habéis visto en internet algún vídeo de esos que hay sobre las trituradoras de pollitos que a mí personalmente me han espantado y me han dejado con la duda de si verdaderamente las grandes cadenas utilizan esos métodos para fabricar los nuggets. Yo, ante la duda, jamás los he comido fuera de casa ni tampoco se los he dado a mi hija, por si acaso...
El caso es que los nuggets caseros te dan una vez más la tranquilidad de saber lo que comes y están buenísimos.

Como la carne picada de pollo no se suele vender como tal, os recomiendo pedirla en vuestra carnicería con tiempo, ya que al usar la misma máquina de picar la carne que para la ternera, los carniceros suelen preferir que se lo encarguéis para hacerlo a primera hora de la mañana, con tiempo de volver a limpiar la máquina antes de que se les llene el negocio 😜.

Es una receta muy sencilla y muy práctica, ya que en un momento podéis tener un montón de nuggets, de la forma y tamaño que queráis, listos para hacer y/o para congelar por raciones para tenerlos listos siempre que los necesitéis. Al igual que las croquetas y el resto de rebozados, se pueden freir sin descongelarlos previamente así que es uno de esos platos "al rescate" para un día de esos que por el motivo que sea necesitas algo rápido y si es casero, mejor que mejor. En resumen, os traigo una receta fácil, que puede ser sin gluten y sin lactosa, baratita y muy rica. Espero que os guste. 




INGREDIENTES:

  • Pechuga de pollo picada (aprox. 900 gr)
  • 1 tarrina de crema de queso sin lactosa
  • 3 huevos (1 para la mezcla y 2 para el rebozado)
  • pan rallado sin gluten
  • harina sin gluten
  • sal
  • aceite de oliva para freir




INSTRUCCIONES:

1.- En un bol mezclamos la carne picada de pollo con un huevo y con la crema de queso. Añadimos también sal al gusto y mezclamos todo bien con una cuchara.

2.- Añadimos a la mezcla un poco de pan rallado, lo justo para dar un poco de consistencia a la mezcla para que no se desparrame cuando intentemos dar forma a nuestros nuggets.
Para que tengáis una referencia, para los 900 gr de esta pechuga tuve que añadir 10 cucharaditas de pan rallado. No intentéis que quede la masa demasiado consistente porque el rebozado también nos ayudará a darles forma y cuanto menos pan rallado pongamos en la mezcla más jugosos quedarán nuestros nuggets.



3.- Una vez que tenemos la mezcla preparada, ponemos en un plato un poco de harina, en otro huevo batido y en otro pan rallado y con una cuchara vamos tomando pequeñas cantidades de mezcla que pasaremos por los tres platos, en ese orden. Al pasar la mezcla por la harina es cuando le tenemos que dar forma en nuestra mano y después con ayuda de un tenedor lo pasaremos por el huevo y el pan rallado.
Si queréis hacerlos sin huevo también podéis, en ese caso rebajad la cantidad de pan rallado de la mezcla ya que no estará tan jugosa. 




En esta foto os muestro la diferencia entre hacerlos sin huevo (el primero) y con huevo (el segundo)





Se debe repetir el paso anterior hasta agotar la mezcla. En mi caso no suelo hacer los nuggets muy pequeños ya que me resulta más cómodo para calcular las raciones hacerlos un poco más grandes. Algunos parecen hamburguesas jajaja. En fin, que dependiendo del comensal, hago nuggets más grandes o más pequeños. Una vez formados los coloco sobre una bandeja plana para meterlos al congelador. Cuando ya estén congelados o semi- congelados (unas horas después) los podéis pasar a una bolsa que siempre se acopla mejor a los huecos del congelador que la bandeja.


4.- Ya sólo nos queda freir los nuggets en abundante aceite caliente. No tengáis prisa ya que son gruesos y tienen que hacerse muy bien por dentro así que dejad que se doren muy bien por ambos lados




Una vez fritos sacadlos a un plato o fuente con papel de cocina para absorber el exceso de aceite y presentar como más os guste.
Recordad que lo ideal es acompañarlos de una ensalada o algún tipo de vegetal para seguir una dieta equilibrada. Espero que os gusten tanto como a mi peque😉.

¡Hasta muy pronto familia! Disfrutad mucho del veranito y las buenas compañías

martes, 18 de junio de 2013

HELADO DE FRAMBUESA

Por las fechas en las que estamos no podía ser de otra manera. Aunque el tiempo está loco y un día tenemos 38ºC y al siguiente toca poner la manta yo sigo con el modo "Helados ON" y el de hoy es de esos que sólo o acompañado de otro sabor está buenísimo. Os presento al cremoso y rico helado casero de frambuesas SIN LACTOSA y con dos finales diferentes para que lo podáis hacer con o sin heladera. No tenéis excusa para no probarlo.

INGREDIENTES:

  • 250gr de frambuesas
  • 125 gr. de azúcar glas
  • 400 ml. de nata para montar (mejor sin lactosa)
  • 50 gr. de azúcar invertido
  • 165 ml. leche entera (mejor sin lactosa)

INSTRUCCIONES:
1.- Hacemos un puré con las frambuesas bien lavadas. Yo lo he hecho con la licuadora pero podéis utilizar cualquier batidora de mano sin problema.


2.- Añadimos el azúcar glas y el azúcar invertido a las frambuesas y batimos.


3.-  Incorporamos la leche poco a poco sin dejar de batir (cuidado que salpica bastante! Mejor hacerlo en un recipiente alto)
4.- En un bol ponemos la nata muy fría y la semi-montamos .  A mí me gusta más utilizar nata sin lactosa no sólo porque es más digestiva y la lactosa no me sienta muy bien. También la prefiero porque la nata se monta mejor cuanto mayor sea el porcentaje de materia grasa. Como mínimo en repostería se debe utilizar un 35.1% M.G. y la nata sin lactosa tiene un 38% M.G. por lo que se monta muy bien.
5.- Con cuidado mezclamos la nata semi-montada con el resto de ingredientes hasta que obtengamos una mezcla homogénea 


6.- Y ahora dependiendo de si tenemos heladera o no haremos lo siguiente:
CON HELADERA: metemos a la nevera la mezcla un mínimo de 3 horas y después procedemos a poner la mezcla en la heladera fría durante aprox.30 min. Después de eso la metemos al congelador una media hora y ya estará listo para consumir cuando queramos. Conservar bien tapado para evitar que se contagie de olores y sabores de otros alimentos.


SIN HELADERA: meteremos la mezcla al congelador directamente en un recipiente resistente y cada aproximadamente media hora (cuando se empiece a congelar) lo sacaremos y meteremos la batidora para introducir aire en la mezcla y conseguir la textura cremosa del helado. Cada vez que lo batamos lo  meteremos otra vez al congelador  y repetiremos el proceso dos o tres veces o hasta que esté demasiado duro para poder batirlo y ya tendremos nuestro rico helado de frambuesas sin necesidad de heladera.
¡Que lo disfrutéis!
Si queréis imprimir la receta lo podéis hacer desde aquí:
 

sábado, 8 de junio de 2013

HELADO MANTECADO

Aunque en algunas zonas de España no lo parece estos días ¡ya es tiempo de helados!. Algunos dirán que todo el año es tiempo de helados pero yo que siempre he padecido de la garganta prefiero no abusar de las cosas muy frías ni muy calientes. Pero todo tiene su momento y éste, queridos, es el momento de los helados caseros, super cremosos, naturales y refrescantes helados. 
Para empezar he elegido los de mantecado que es un sabor muy neutro pero con una textura muy cremosa ¡buenísimo! 


Esto sólo es el principio, ya tengo mi nevera a tope de ingredientes para hacer experimentos y tengo bastantes recetas de sabores que estoy deseando probar. Además sigue en pie la pregunta que os planteaba en Facebook ¿cuál es vuestro helado favorito? o ¿de qué os gustaría probar un helado nuevo? ya que experimento me gustaría que fuese para crear helados que os gusten así que no os cortéis en sugerirme sabores ¿vale? ya he tomado buena nota de los que me habéis ido diciendo y pronto los tendréis por aquí.
Bueno, pues vamos allá con la recetita. Después de mucho leer he optado por probar con una versión propia de la receta de "Las recetas de mamá" aunque con mayor proporción de azúcar invertido, algo que no es imprescindible pero que os recomiendo hacer porque es muy fácil y hace que el helado no se cristalice y se mantenga cremoso...
Por cierto, salvo en la leche en polvo (que podéis sustituir por maizena) el resto de productos lácteos los he utilizado "sin lactosa" para que sea más digestivo pero lo podéis hacer con los normales.
INGREDIENTES:
400 ml. de leche sin lactosa
200 ml. nata para montar sin lactosa
50 gr. leche en polvo
155 gr. azúcar
5 yemas de huevo
canela en rama


INSTRUCCIONES:
1.- En un cazo se bate la leche con la nata 
2.- se va incorporando poco a poco la leche en polvo. Aunque no es imprescindible ayuda a mantener la textura cremosa ya que absorbe la humedad de la mezcla.
3.- ponemos en la mezcla anterior una rama de canela y se calienta todo junto a fuego bajo-medio removiendo de vez en cuando 


4.- En un bol se baten las yemas con el azúcar y cuando hayan clareado y duplicado su volumen añadimos el azúcar invertido poco a poco y batimos hasta obtener una mezcla homogénea y brillante.


5.- Incorporamos la mezcla del punto 4 al cazo que tenemos calentando poco a poco batiendo suavemente y dejamos que se espese ligeramente sin dejar en ningún caso que llegue a hervir. Si tenéis un termómetro de cocina no dejéis que suba de 85ºC.


6.- Una vez que hemos alcanzado la textura indicada retiramos del fuego y lo enfriamos en nevera alrededor de 12 horas
7.- Si tenéis heladera seguid las instrucciones de uso, en la mía, tras enfriar en el congelador la base durante 12 horas, he batido la mezcla fría 30 min y luego la he pasado a un recipiente de plástico con tapa y lo he metido al congelador.

Si no tenéis heladera podéis meter la mezcla al congelador y cada media hora sacarlo y batirlo con la batidora de varillas para meterle aire a la mezcla repitiendo esto 2 ó 3 veces.
El resultado en ambos casos es un helado super cremoso que se endurecerá un poco al refrigerarlo.

Y llegados a este punto ya tendréis vuestro helado listo para pasar la prueba de fuego ¡al ataque!

NOTA: Como todo, los helados también se pueden adornar con ricos toppings: yo he puesto topping de caramelo y unas almendras crocantis que había comprado en Mercadona y que le dan un toque de muerte pero también podéis usar bolitas de colores, fideos de chocolate, etc.